Portada > Noticias

Emprendimiento y Responsabilidad Social Empresarial. Artículo de opinión de Francisco Jesús Gálvez. PDI.Universidad de Granada

Tras unos años convulsos como consecuencia de numerosos acontecimientos adversos, ahora la mayoría estaremos de acuerdo en que ha vuelto a imperar la normalidad. Sin embargo, la nueva normalidad resulta sustancialmente diferente a la que estábamos acostumbrados, y es que hemos aprendido a valorar más nuestro tiempo, a disfrutar más de los que nos rodean y, en definitiva, dar más valor a lo que es realmente importante para nosotros. Y este efecto no se ha producido sólo a nivel individual, sino también a nivel corporativo, pues son cada vez más las organizaciones que adoptan comportamientos más responsables, conscientes de las adversidades que se presentan en su entorno más cercano. En este sentido, la Responsabilidad Social Empresarial ha adquirido un carácter estratégico para la mayoría de las organizaciones que la implementan, conscientes de que las partes interesadas cada vez las presionan más. Esta gestión estratégica tiene grandes implicaciones para las organizaciones, que no sólo contribuyen al desarrollo de actuaciones de interés general que generan valor para las comunidades, sino que además existen evidencias de que genera un valor intangible para sus clientes que se traslada a sus decisiones de compra, a la mejora de la imagen de la marca y, finalmente, reporta en la obtención de beneficios estratégicos.

Sin embargo, aún quedan algunos retos importantes por abordar. Así, mientras que todos los días podemos leer en los periódicos o ver en las noticias que el PIB, el turismo o el empleo han recuperado los niveles prepandemia, lo que ha centrado el debate político actual en sí “la Economía española va como una moto” o no, lo cierto es que continúan existiendo graves problemas estructurales, como es el caso del empleo de las personas con discapacidad. Los últimos datos disponibles por el INE para el año 2021, cifran la tasa de empleo de las personas con discapacidad en el 26,9%, mientras que en ese mismo periodo la tasa de empleo para las personas sin discapacidad fue del 58,51% (30 puntos porcentuales superior). De modo que durante los últimos años hemos apreciado importantes esfuerzos legislativos y políticos para avanzar en materia de igualdad, aunque los avances parecen apreciarse únicamente en las cuestiones relativas al género, mientras que las personas con discapacidad no parecen haber conseguido importantes hitos, al menos en materia de acceso al empleo.

Parece incuestionable por tanto que, para avanzar en esta materia, el tejido empresarial debe continuar acogiendo el valor de la diversidad y la gestión del talento para incorporar progresivamente a este colectivo al mercado de trabajo. En este punto, el alineamiento de los planes de Responsabilidad Social Empresarial pueden contribuir considerablemente a este objetivo. Y es que quizás también es el momento de replantear algunas cuestiones. ¿Y si en lugar de sólo realizar esfuerzos para integrarlos en los equipos propios de trabajo a través de la contratación por cuenta propia, no comenzamos a favorecer el emprendimiento del colectivo? Previsiblemente contribuiría a la consecución de un segundo objetivo, y es que reduciría considerablemente los estigmas y las inquietudes de muchas organizaciones, al tiempo que podría facilitar la adaptación del puesto de trabajo, en lugar de la tradicional adaptación de los candidatos al puesto, contribuyendo así a la mejora de la productividad y del desarrollo del talento.

En este contexto, las organizaciones pueden contribuir a través de su RSE a este desarrollo. Aquí se han producido importantes novedades para las organizaciones, que como consecuencia de la proposición de ley de la Ley 49/2002, de 23 de diciembre, de régimen fiscal de las entidades sin fines lucrativos y de los incentivos fiscales al mecenazgo, mejoran los incentivos fiscales de las empresas donantes. Ahora, las deducciones del Impuesto sobre Sociedades pasarán del 35% al 40%. En el caso del mecenazgo sostenido, la deducción aumentará hasta el 50% para personas jurídicas (hasta ahora era el 40%) siempre que se haya realizado la misma donación en los dos años anteriores.

Así, incluso aquellas empresas que no puedan cumplir con la contratación del 2% de sus empleados (siempre que éste sea superior a 50) con la Ley 13/1982, de 7 de abril, de integración social de los minusválidos, y que decidan acogerse al Real Decreto 364/2005, de 8 de abril, por el que se regula el cumplimiento alternativo con carácter excepcional de la cuota de reserva en favor de los trabajadores con discapacidad, pueden verse beneficiadas fiscalmente de sus aportaciones monetarias en el fomento de actuaciones orientadas al emprendimiento de las personas con discapacidad.

Esto plantea muchas dudas aún. Sin embargo, las tradicionales herramientas parecen no ser capaces de mejorar los resultados más allá de los actuales. Por esta razón resulta trascendental que las organizaciones fomenten la generación de lazos más estable con las entidades sociales para plantear nuevas actuaciones, como el desarrollo del emprendimiento de las personas con discapacidad, contribuyendo así no sólo al desarrollo de su autonomía, sino también al desarrollo de su talento individual y colectivo. ¿No crees que, al menos, merece la pena intentarlo? Yo creo que sí.

 

Francisco Jesús Gálvez

PDI. Departamento de Economía Financiera y Contabilidad de la Universidad de Granada

Últimos artículos publicados
Archivo
Etiquetas
Arriba Volver Atrás
Diseño y desarrollo web Im3diA comunicación

Bienvenida/o a la información básica sobre las cookies de la página web responsabilidad de la entidad: EDIS - Escuela de desarrollo e innovación social

Una cookie o galleta informática es un pequeño archivo de información que se guarda en tu ordenador, “smartphone” o tableta cada vez que visitas nuestra página web. Algunas cookies son nuestras y otras pertenecen a empresas externas que prestan servicios para nuestra página web.

Las cookies pueden ser de varios tipos: las cookies técnicas son necesarias para que nuestra página web pueda funcionar, no necesitan de tu autorización y son las únicas que tenemos activadas por defecto. Por tanto, son las únicas cookies que estarán activas si solo pulsas el botón ACEPTAR.

El resto de cookies sirven para mejorar nuestra página, para personalizarla en base a tus preferencias, o para poder mostrarte publicidad ajustada a tus búsquedas, gustos e intereses personales. Todas ellas las tenemos desactivadas por defecto, pero puedes activarlas en nuestro apartado CONFIGURACIÓN DE COOKIES: toma el control y disfruta de una navegación personalizada en nuestra página, con un paso tan sencillo y rápido como la marcación de las casillas que tú quieras.

Aceptar Configurar Preferencias